Este es otro de los capítulos que tratan sobre el rol de las mujeres en esos años y sobre el papel que cada una puede o quiere tomar y sobre todo esa difícil elección entre dar prioridad a la familia o al trabajo.
De las que pueden elegir y se conforman, o mas bien se podria decir que le dan prioridad a la familia, como puede ser el caso de Megan. Le ofrecen la posibilidad de cumplir uno de sus sueños pero no pone todo lo que hay que poner, y no me malinterpreteis por ello, y prefiere cumplir el papel de la perfecta esposa, apoyando en todo a su marido antes que ariesgarse, puede decirse que es conformista pero lo hace porque quiere, nadie le obliga a ello.
Por otra parte tenemos a Joan, que da prioridad a la familia sin dejar de lado su trabajo, y quien a pesar de ser una de las mujeres mas fuertes es a la vez de las mas vulnerables, es una madre soltera con un hijo. Ha decidido sacarlo adelante por ella misma pero hay momentos en que una no puede elegir lo que quisiera y tiene que tomar decisiones que no gustan pero es que quizás no tiene segundas jugadas o alternativas, o simplemente en ese momento no las ve y tiene que elegir un camino menos bonito para conseguir lo que quiere.
Por ultimo tenemos a Peggy que antepone su trabajo por encima de todo lo demás. Empezó desde abajo siendo secretaria y de la mano de Don, ha ido creciendo en la empresa. Esta empeñada en triunfar, cree que no se le valora lo suficiente, piensa que muchas veces por el hecho de ser una mujer no se le escucha o no se toman en cuenta sus opiniones de la misma forma que si fuera un hombre, por lo que esta dispuesta a ariesgarse y marcharse a otro sitio para demostrar su valía.
Don sabe que es capaz de llegar muy alto y aunque a veces no lo parezca realmente la aprecia muchisimo. Veremos que pasa a partir de ahora.
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